«El Campito» será sitio de la Memoria
Así lo anunció Alberto Fernández en su discurso ante la Asamblea Legislativa el domingo pasado, un reclamo de larga data por parte de los organismos de Derechos Humanos de San Miguel, Malvinas Argentinas y José C Paz
El presidente puso la política de Derechos Humanos como columna vertebral de su gobierno y así en ese marco responde a la demanda presentada por los sobrevivientes, familiares y amigos de detenidos desaparecidos en la última dictadura cívico militar en Campo de Mayo. De esta manera Fernández se espresó en su discurso:
En el contexto de la Ley Nacional de Sitios de Memoria, queriendo preservar el recuerdo colectivo del horror de la dictadura, vamos a impulsar la creación del espacio de memoria El Campito, en Campo de Mayo, por donde pasaron más de 5.000 víctimas.
Esta noticia fue celebrada por los referentes de los organismos de Derechos Humanos de la región, especialmente Iris Avellaneda, quien encabeza la Comisión de Sobrevivientes, familiares y compañerxs de Campo de Mayo. Iris habló con FM Tinkunaco donde contó cómo recibió el anuncio:
Estaba sola y me largué a llorar, sentí una alegría enorme por lo que dijo y una que nosotros le hemos mandado cartas por los cuatro puntos pero no sé si realmente la recibió o la leyó, y de ahí saco lo que nosotros le habíamos puesto pero la importancia que tiene es que por lo menos este gobierno haga algo por los centros clandestinos. Para nosotros fue una alegría, esta noticia para mí fue espectacular, me puse muy contenta”.
Por su parte la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, también se hizo eco de esta desición del Poder Ejecutivo. Y en declaraciones a FM La Uni expresó que:
“La intención de los organismos de DDHH es que cada espacio se transforme en un espacio de Memoria. De manera que ahí se recuerde lo que pasó, lo que hicieron y para que no vuelva a pasar”
También agregó que «Justamente en ese lugar no solo hubo prisioneros, sino que también nacieron nietos que estamos buscando o algunos que ya encontramos” dado que en el predio de Campo de Mayo se encuentra el Hospital Militar donde funcionó otra de las maternidades clandestinas. Carlotto afirmó: “No sabemos si en esas tierras, abajo, no están las victimas de los salvajes de esta época”.
Las más de 3.000 hectáreas de Campo de Mayo han sido un «espacio» muy apetecido por Macri, quien a fines de su gobierno había lanzado el proyecto de la creación de una reserva natural y un parque nacional, que fue rechazado enérgicamente tanto por los organismos, como por los vecinos y vecinas de la zona. Campo de Mayo es colindante con los partidos de Malvinas Argentinas, San Miguel, San Martin y Tigre. La medida anunciada por el entonces presidente quedó sin efecto por la negativa unánime de todos: los organismos de DDHH, sindicatos y trabajadores, vecinos y vecinas, las universidades, entre otros tantos. Además se sospecha que detrás de este proyecto había interés de convertirlo en un proyectos inmobiliario.
En Mayo de 2018 se realizó la «1° Entrada al Campito», Iris Avellaneda sobreviviente y miembro de la Comisión de Sobrevivientes, Amigos es quien impulsó el ingreso ante la justicia quien la autorizó y luego en 2019 permitió la «señalización del lugar». Desde entonces cada dos meses se realiza un ingreso dado que el predio donde funcionaba el centro clandestino de detención no se encuentra accesible sino que hay que atravesar un descampado «húmedo, silencioso, con un silencio de muerte» según describen quienes estuvieron allí.
Según Fabián Dominguez (periodista, escritor, historiador, docente) en Campo de Mayo coexistieron al menos 5 centros clandestinos de Detención desde 1976 según se recoge de los testimonios: El Campito, Las casitas «Los tordos», el Hospital Militar, el Batallón, El Polígono de tiro, en el campito funcionaba la pista de aviación desde donde despegaban los vuelos de la muerte. Dominguez investigó y escribió varios libros acerca del terrorismo de Estado en Campo de Mayo. En su último libro «Tierra de Sombras» a través de 16 testimonios surge que en esos campos actuaban no sólo los altos mandos y oficicales sino que también participaban de las «tareas» los suboficiales de las escuelas, entre ellas de la Escuela de Suboficiales Sargento Cabral.
Cabe agregar que el actual secretario de Derechos Humanos, Horacio Petragalla Corti es también quien ha dado lugar a las solicitudes de las víctimas y familiares del terrorismo de Estado en Campo de Mayo. Asi como también la Ministra de Justicia y Derechos Humanos, Marcela Losardo ha hecho lo propio recibiendo las demandas.
Entre los anuncios del presidente también se destaca:
Vamos a recobrar el rol activo del Estado en el juzgamiento de los crímenes de lesa humanidad. Queremos asegurar con celeridad, el papel que históricamente le correspondió al Estado en cuanto responsable de las políticas públicas que garanticen el proceso de memoria, verdad y justicia.
La importancia de que El Campito se convierta en sitio de la Memoria implica que por un lado se investigue y se continuen los juicios que tramitan tanto en los tribunales de San Martín como en Zárate- Campana sino que se ponga luz sobre una sombra que ha cubierto no sólo Campo de Mayo sino las ciudades colindantes. Muchos de los genocidas son y han sido vecinos respetables de la zona dado que no se les conoce la cara ni se han difundido los nombres como en los casos de otros centros. Al mismo tiempo presenta el desafio de coexistencia entre los sobrevivientes, familiares y la guarnición militar.
El próximo viernes 20 de marzo la Asociación de Sobrevivientes, familiares y compañerxs de Campo de Mayo ingresará nuevamente a “El Campito” para lo cual quienes quieran acompañar deben inscribirse en el facebook de la asociación.
