Crónica de un hombre «exitoso»

Escribe Camila Correa, exclusivo para InfoBaires24

Una empresa vinculada al periodista y candidato a diputado nacional por el PRO, Fernando Niembro, embolsó 21 millones de pesos en la Ciudad de Buenos Aires. En esta nota, te contamos las irregularidades que atraviesan la historia personal, profesional y política del periodista sospechado.

El nombre de Fernando Niembro, quien encabeza la lista de diputados del PRO por la provincia de Buenos Aires, resonó fuerte en los medios de comunicación debido a que una empresa vinculada a su persona recibió más de 21 millones de pesos en contrataciones directas del gobierno de la Ciudad entre 2012 y 2015.

Se trata de La Usina Producciones, una compañía fundada por el periodista y Alberto Meza en mayo de 2012. Desde entonces, se convirtió en un importante proveedor de servicios del Estado porteño en los más diversos rubros, que van desde repartir volantes en la vía pública hasta la realización de encuestas de satisfacción.

Los más de 170 contratos efectuados fueron ocultados y no figuran en el Boletín Oficial, como tampoco hay registros de las remuneraciones por más de $800 mil que recibió uno de los hijos del comentarista de fútbol o los más de $7,6 millones cobrados por su socio en la empresa, según constató Tiempo Argentino. La ONG que conduce su ex mujer, Mirta Brizuela, «Fundación para el Bienestar Social de la Gente», por su parte, recibió más de $2,5 millones.

La Usina Producciones recibió más de 21 millones de pesos en contrataciones directas del gobierno de la Ciudad entre 2012 y 2015.

Dos años después de su fundación, en mayo de 2014, el periodista se desvinculó de La Usina Producciones, aunque para ese entonces ya había recibido más de $13 millones de parte del gobierno de Mauricio Macri. La partida de uno de los socios fundadores no alteró el flujo de dinero de las arcas porteñas hacia la compañía: durante el resto de 2014 y 2015 continuó prestando servicios a la Ciudad por $8 millones.

Uno de sus mayores benefactores fue el Ministerio de Ambiente y Espacio Público, que conduce Edgardo Cenzón. Antes de recalar en la repartición de mayor presupuesto en toda la Ciudad, el remplazante de Diego Santilli estuvo a cargo de Compras y Contrataciones del Ministerio de Hacienda, una de las áreas más sensibles del gobierno y de la administración de la Metropolitana. Los acuerdos comerciales relacionados con el control de la basura y la satisfacción de los vecinos le reportaron a la empresa domiciliada en la Avenida Crámer al 1600 más de $ 5 millones.

«Contrato de la basura» por $ 2,4 millones, «Servicio de encuesta – DG limpieza», «Servicio de encuesta – DG reciclado», «Servicios de Auditoría de Ambiente y Espacio Público”, son algunos de los conceptos por los cuales la compañía recibió dinero del gobierno porteño. Pero también hubo medio millón de pesos embolsado gracias a su servicio de «distribución de folletería» encargada por la Subsecretaría de Transporte, a cargo de Guillermo Dietrich.

Otros rubros parecen menos claros, como «Servicios de instalación y puesta en funcionamiento de planta para tratamiento de efluentes – DG Limpieza, recolección y limpieza por 3ros» donde se cristalizaron casi $ 300 mil para los bolsillos del periodista y Meza.

La Jefatura de Gobierno fue otra de las áreas que requirió con asiduidad los servicios del candidato y lo contrató para diversas acciones que totalizaron más de $6 millones.

Tiempo Argentino realizó un pedido de Acceso a la Información -Nº PV-2015-19415080-MGEYA-, herramienta legal que obliga al Estado porteño a responder por sus actos, para conocer cuáles eran los servicios que la empresa fundada por Niembro le había prestado a la Ciudad, pero aún no obtuvo respuesta. El silencio gubernamental persiste a pesar de que ya transcurrieron más de 45 días desde la presentación y que por la Ley 104, la administración tiene diez días hábiles para responder, prorrogables por otros diez.

Consultado por el diario sobre estas exorbitantes cifras de dinero, el candidato a diputado nacional se excusó alegando que “todos los contratos fueron obtenidos por licitación” y que ya “se liberó” de la empresa: “no tengo nada que ver”, aseguró.

Lo cierto es que estas sospechosas prestaciones se inscriben en una serie de irregularidades que atraviesan toda la vida política y profesional del periodista.

Nacido en el barrio porteño de Parque Chacabuco, Fernando “Chiche” Niembro se crió en una familia de extracción netamente peronista. Su padre Paulino fue un importante sindicalista de la Unión Obrera de la Metalúrgica, dirigente del club Nueva Chicago y mano derecha de Augusto Timoteo Vandor.

A sus treinta años, acomodado en la profesión que elegiría por muchos más, relató el famoso partido entre las selecciones de Argentina y Polonia. ¿Cuándo? Durante el mismísimo golpe de estado del 24 de marzo de 1976. La junta militar ordenó disolver el Congreso, destituir a los miembros de la Corte Suprema de Justicia, intervenir los sindicatos y los medios de comunicación y prohibió toda actividad política. Sin embargo, la transmisión del partido quedó exceptuada, y Niembro continuó con su trabajo en Canal 7 durante todo el Proceso.

Niembro relató el partido entre Argentina y Polonia que se jugó el mismísimo día del golpe de estado del 24 de marzo de 1976, y siguió trabajando durante el proceso

Con la restitución democrática, el periodista encontró su lugar en Canal 9, donde se mantuvo hasta el arribo del menemismo. Sus ideas esencialmente neoliberales en combinación con la cuna peronista encontraron en Carlos Saúl el mecenas ideal para su carrera política.

Así fue que pasó a ocupar el cargo de Secretario de Medios, y como tal, fue el encargado de hacer públicos los indultos a los militares; aquellos decretos que le concedieron impunidad a los genocidas, constituyendo una de las heridas más graves para la democracia.

Niembro fue el encargado de hacer públicos los indultos a los militares que le concedieron impunidad a los genocidas

Luego fue designado por Carlos Ménem como interventor de Canal 11 en la antesala de su privatización: fue él quien realizó el traspaso de la señal a manos de los Vigil, dueños de la Editorial Atlántida y socios del entonces gobierno.

En los pasillos de la emisora de la calle Pavón es recordado como el único que no pagó los sueldos en tiempo y forma en la historia del canal. Aunque en su historia personal, no será la primera ni la última vez que lo haga, como se verá más adelante.

Más acá en el tiempo y consultado por su experiencia en la función pública durante los ’90, Niembro reivindicó su decisión señalando que “fue una experiencia irrepetible” y que actuó “desde el punto de vista profesional”.

Con el declive del menemismo, el periodista tuvo su primer contacto con el espacio del PRO peronista. Allí confluyen el diputado Jorge Triaca, el legislador Cristian Ritondo y el ministro de Gobierno Emilio Monzó. De hecho, los vínculos de Niembro lo llevaron a ser quien contactó a varios jóvenes peronistas con Macri para que se sumaran al PRO. Entre ellos, Ritondo y el ministro de Espacio Público, Diego Santilli.

Niembro volvió a aventurarse en el mundo de la política en 2001, pero tras una fallida candidatura a diputado, en una fórmula que se integraba con Irma Roy y Gustavo Béliz, decidió dedicarse a lo que mejor sabía hacer.

Desde fines de los ’90 el periodista trabajó activamente para impulsar la carrera política del entonces presidente de Boca Juniors, Mauricio Macri. Junto a su compañero Marcelo Araujo, utilizaron con insistencia sus espacios en la emisora La Red o en el programa “Fútbol de Primera” para propalar frases categóricas contra su mayor rival de entonces: Aníbal Ibarra.

Desde fines de los ’90 el periodista trabajó activamente para impulsar la carrera política del entonces presidente de Boca Juniors, Mauricio Macri

“Buenas noches, si Aníbal Ibarra se hubiera preocupado de la salud y la educación tanto como lo hizo con Racing e Independiente, hoy estaríamos mucho mejor”. Así abrió Araujo el programa futbolístico de mayor audiencia en una ocasión. Su amigo y socio hizo lo propio sugiriendo: “Si pierde Macri, a los botes”.

Su poder en los medios de comunicación era fuerte y él lo sabía; la posibilidad de operar políticamente bajo la figura de un ingenuo relator futbolístico le dio comodidad para convertirse en uno de los mayores armadores del macrismo.

En efecto, así lo sostuvo en febrero de 2002, en entrevista con la revista El Gráfico: “Yo puedo ayudar y aportar, pero jamás sería diputado o senador, aunque me muero de ganas. Igual creo que tengo más poder desde los medios de comunicación”, admitió.

Creo que tengo más poder desde los medios de comunicación, admitió Niembro en una entrevista en 2002

Sin embargo, no desdeñó los vínculos con el justicialismo porteño que había forjado en su breve pero contundente trayectoria política e intentó consolidar la figura de Mauricio Macri al interior del PJ. Ese fue el verdadero motivo de sus recurrentes críticas públicas a Daniel Scioli, quien amagó a candidatearse para jefe de gobierno pero finalmente terminó acompañando la fórmula presidencial de Néstor Kircher.

Con el correr del tiempo, el enemigo se trasladó hacia el gobierno nacional, convirtiéndose en el blanco fácil para el periodista que, desde su sillón de relator, ya se encontraba embarcado en la campaña presidencial de Mauricio Macri. Sin embargo, no fue hasta este año que su candidatura a diputado nacional por el PRO fue confirmada.

Anteriormente, su nombre había sido noticia a causa de una triste situación para los alumnos que asistían a la escuela de periodismo que dirigía junto a Marcelo Araujo. A fines de 2013 se enteraron que su facultad no abriría las puertas. Eso sí: un mes antes se habían encargado de cobrarles la matrícula del año siguiente.

Los jóvenes reclamaron durante varios días sin obtener respuesta alguna, mientras que los docentes desesperaban por su futuro laboral. Finalmente, los periodistas conjugaron la institución, arruinada económicamente, con el Instituto Superior Crónica, donde derivaron a sus alumnos.

En la página oficial de la facultad borraron los nombres de todos los profesores (con quienes tuvieron que enfrentarse en diversos juicios por la falta de pago) y emitieron un comunicado donde prometieron dar solamente cinco horas cátedra al año, despegándose absolutamente de la ilusión de los estudiantes que anhelaban aprender de ellos.

Hoy, Fernando Niembro es la cabeza de lista de los diputados del PRO por la provincia de Buenos Aires. Aunque en enero del corriente año lo negaba rotundamente, finalmente oficializó su postulación, enfocándose por completo en su nuevo intento en la política.

Sus propuestas van a la par del líder de su partido. En ese sentido, no dudó en manifestarse en contra de Fútbol para Todos, considerando que “no es prioritario” y “debe darse de baja”, porque “todos tienen la posibilidad de ver fútbol por el sistema de cable privados”. Incluso “en las villas, todos tienen un sistema de cable donde pueden mirar fútbol”, aseguró.

Pero, como dice el dicho, “amor con amor se paga”, y este amor entre Niembro y Macri no es sólo ideológico. Su precio se valúa en 21 millones de pesos: una cifra nada menor para tantos años de militancia encubierta.