Avanzan las conspiraciones golpistas en América Latina
Escribe Altamiro Borges*
El jueves pasado (20), durante un pronunciamiento en cadena nacional de radio y televisión, la presidenta Cristina Kirchner hizo una defensa enfática de Dilma Rousseff y Lula y, afirmó que hay una “conspiración” en curso en América Latina.
La argentina fue mucho más corajuda que muchos gobernantes brasileños. Según el relato de la BBC-Brasil, Cristina Kirchner se refirió a las protestas de la élite en contra de su gobierno, en 2011, y ponderó: “Lo que está ocurriendo en otros países de la región, como en Brasil, es lo que ocurrió en Argentina… Miren lo que están haciendo con Dilma”. Para ella, los “cacerolazos” y las “marchas” son inflados por “sectores de la prensa y de la justicia” para desgastar las fuerzas progresistas de la región.
La presidenta argentina insinuó que los Estados Unidos estarían inmersos en la conspiración. “Las ollas tienen marca registrada del país del norte que tiene interés en América Latina”. Luego del pronunciamiento, volvió a citar a Brasil en un apasionado discurso para los militantes concentrados en el patio interno de la Casa Rosada, sede del gobierno. “Con el micrófono en la mano, e interrumpida por aplausos, dice que ‘gran parte de lo que construimos se lo debemos a ellos. (Néstor) Kirchner, Hugo (Chávez) y Lula’ […] Es por eso que ahora están avanzando contra Lula. Estemos todos atentos’’’. Cristina Kirchner criticó las élites que quieren “frustrar el proceso de desarrollo social que algunos tildan de ‘populista’”.
‘Tuitazo’ contra el golpismo
La reacción contundente contra el golpe de estado en Brasil no partió apenas de la mandataria argentina. Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, participó del “tuitazo” en apoyo a Dilma Rousseff el miércoles (20), día en que los movimientos sociales salieron en las calles contra la ofensiva de la derecha en el país. Durante la tarde, los hashtags #AmericaLatinaConBrasil y #LulaDilmaSomosTodos estuvieron entre los tópicos más comentados por los usuarios de Twitter en Venezuela.
El Tuitazo tuvo inicio a las 13 horas, cuando Nicolás Maduro publicó en portugués: “Me uno a la jornada mundial de solidaridad y amor al Brasil”. El tuitazo tuvo adhesión de varios líderes influyentes de chavismo. “Por nuestra patria grande libre y soberana, nos unimos al pueblo hermano de Brasil para decir Lula y Dilma Somos Todos”, publicó en gobernador de Aragua, Tereck El Aissami. El chanceler Delcy Rodrigues escribió que el gobierno Dilma es el blanco de una tentativa de “golpe suave” orquestado por el “imperio”.
La postura firme y explicita de Cristina Kirchner, Nicolás Maduro y de otros líderes progresistas de la América Latina confirma el marco de tensión política en el continente. Varios países de la región sufren con la acción desestabilizadora de las fuerzas de derecha, incentivadas por los medios de comunicación privados.
La postura firme y explicita de Cristina Kirchner, Nicolás Maduro y de otros líderes progresistas de la América Latina confirma el marco de tensión política en el continente
Durante la etapa actual, Ecuador, Venezuela, El Salvador y Brasil son las naciones que atraviesan una mayor turbulencia. En general, las acciones golpistas cuentan con el apoyo de los medios de comunicación privados y con el discreto incentivo de “fundaciones” de los EUA. Los slogans fascistas son similares. La semana pasada, miles de “blanquitos” se manifestaron agresivamente en Quito vociferando “Fuera Rafael Correa”. En Venezuela, los empresarios sabotearan explícitamente la economía. En El Salvador, las mafias criminales patrocinan una ola de violencia en varias provincias.
La táctica imperial de la desintegración
En un artículo publicado en el sitio “Actualidad RT” en este lunes (24), la profesora Yizbeleni Gallardo Bahena, de Universidad Nacional Autónoma del México (UNAM), alerta que “en los últimos años el mundo experimentó en distintas regiones una serie de ‘guerras de baja intensidad’ que analizadas en conjunto, evidencian una estrategia de atomización en zonas claves. América Latina está viviendo los embates de lo que parece ser una táctica de desintegración”. Para la especialista en geopolítica, Brasil es el centro de esta conspiración con objetivos políticos y económicos.
Las acciones golpistas cuentan con el apoyo de los medios de comunicación privados y con el discreto incentivo de “fundaciones” de los EUA
“La República Federativa del Brasil es la sexta economía mundial, quinto país más poblado y quinto país más extenso del mundo. Su superficie constituye casi la mitad del territorio del la América del Sur, y con excepción del Chile y Ecuador, tiene fronteras con todos los países de la región. Todo eso le da un papel preponderante desde el punto de vista geopolítico. Brasil lidera una constante estrategia de integración regional: la creación del Mercosur, hace 25 años, junto a Argentina, Uruguay y Paraguay, con la adhesión de Venezuela, e impulsó el proyecto aun más ambicioso de la Unasur”. La autora incluso cita la fundación de los Brics, “que se transformaron en un bloque avasallador y provoca todas las alertas al ‘establishment’ mundial. El Brasil es pieza fundamental en el mapa de recomposición geoestratégica internacional”.
Estos y otros factores explicarían, según la profesora de la UNAM, la actual onda desestabilizadora en el Brasil, patrocinada por “especialistas en revueltas”, “oportunistas” y “mercenarios políticos”. Para ella, el objeto principal de esta escalada es “promover la desintegración de los bloques que pretenden crear un contrapeso económico, político, territorial y militar a los grupos que han mantenido su hegemonía durante los últimos cincuenta años… Integración ‘versus’ atomización, a esto se enfrenta Estados Unidos en el día de hoy y Brasil es clave para el futuro. La atomización genera subordinación, subdesarrollo y pobreza; la integración genera prosperidad, inclusión y disminución de la desigualdad social’.