Arribas y Majdalani en el Congreso: el policía Bogoliuk es un santo – (Nota II)
Majdalani profundizó en secreto ante la Comisión Bicameral de Inteligencia, presidida por el senador radical Marino, su defensa del policía extorsionador y expresó que “El currículum de Bogoliuk, la verdad, es un currículum bastante nutrido».
Especial de Infobaires24 (Nota II)
Espionaje y extorsiones a la carta
«De hecho, Bogoliuk armó con Marcelo Sain la Policía de Seguridad Aeroportuaria y trabajó con él. Sain es la persona que hizo la modificación de la ley 25.520, ley de inteligencia nacional; fue director de la Escuela Nacional de Inteligencia y eligió a Bogoliuk para trabajar con él. Para nosotros fue un antecedente suficiente, además de haber ostentado varios cargos públicos. Entró a la AFI el 4 de mayo de 2017 y trabajó hasta el 1 de enero de 2018. Estuvo en la dirección de Reunión del AMBA y se encargaba de la delegación Ezeiza”, recreó.
De seguir los pasos de la declaración de Majdalani sobre su espía estrella, habría que ofrecerle sin dilaciones la jefatura de Ejército.
Hay que recordar que el susodicho Bogoliuk está detenido por orden de Alejo Ramos Padilla, juez federal de Dolores. Se lo acusa de ser uno de los organizadores de una banda criminal que operaba en dos renglones al menos: espionaje ilegal y extorsiones. Si los jefes de los espías defienden a ese personaje, es evidente que la AFI es hoy poco menos que la Armada Brancaleone que garantiza, en todo caso, el uso irrestricto de los fondos reservados y no la seguridad de nadie.
Aclararon también, a coro, Majdalani-Arribas, que Bogoliuk no pertenecía a la planta permanente de los espías sino que era un contratado y que trabajó siete meses. A ciencia cierta, en un organismo de espionaje que cuenta con fondos reservados cuyo uso desconoce la sociedad, ese dato es impreciso y posiblemente antojadizo.
Solo Maxwell Smart podría explicar mucho mejor lo que sucede en la oscuridad de las acciones del dúo Arribas-Majdalani
El show de Marcelo D’Alessio
Arribas y Majdalani abundaron sobre los detenidos por el caso D’Alessio como el ex policía Aníbal Degastaldi, recordado por su actuación de dudosa calidad en el caso del crimen de María Marta García Belsunce y exonerado en 2003 por presunto enriquecimiento ilícito. En principio, negaron que perteneciera a la AFI. Arribas explicó que el agente Pablo Pinamonti era el responsable de la Dirección de Reunión AMBA, que la ex agente Ana Poledo, mediática en su participación en un almuerzo de Mirtha con Natacha Jaitt (otra vez los discípulos de Smart), ya no pertenecía a la fuerza cuando fue a las pantallas.
Arribas aprovechó la ocasión para expresar que la AFI no tiene agentes inorgánicos y que los únicos son los que aparecen en la nómina de personal del espionaje. Algo poco creíble cuando se sabe que la agencia opera con dinero no declarado. Respecto al ex fiscal Eduardo Miragaya, a quien se acusa de haber operado contra el juez Sebastián Casanello en la causa de la Ruta del Dinero K, Majdalani expresó que salió de su labor porque “no nos gustaba el trabajo que efectuaba”. Está claro, no logró expulsar de la justicia a Casanello. Y negó, por supuesto, esa acción como parte de la labor de los espías de Mauricio Macri.
Hay que detener a Moyano
Al hablar del apriete al juez Carzoglio para que detuviera a Pablo Moyano, surgieron los nombres de los agentes Sebastián Destefano y Fernando Di Pasquale. Arribas dijo que la acción de sus agentes fue preventiva y tuvo la intención de evitar posibles “desmanes que podrían afectar la paz social”. Por eso pedían detener como fuese a Pablo Moyano. Increíble. Arriba dijo entonces según las fuentes: “Dispusimos que dos funcionarios con competencia específica en la materia se apersonaran en el tribunal instructor de la causa a efectos de verificar su estado y establecer la posibilidad cierta de que el magistrado actuante eventualmente dispusiera la detención del señor Moyano”. ¿Qué dirá y hará el gobierno ante una declaración tan directa de implicación en un “apriete” oficial? El mismo disponía el uso de la justicia por el Poder Ejecutivo a pedido del Presidente.
El gobierno se derrumba por la falta de credibilidad y la sucesión de mentiras que emite hace casi cuatro años
Hasta el momento, la Comisión Bicameral de Inteligencia no se ha expedido sobre los dichos, las reflexiones y las confesiones de los funcionarios de Macri encargados de espiar. Lo más probable es que no haya más que un dictamen para salir del paso aunque se espera que existan sorpresas.
El responsable de la comisión, el radical pampeano Juan Carlos Marino, está acusado de abuso sexual. La causa está en el juzgado federal N° 5 a cargo de Ariel Lijo, y la investigación está a cargo del fiscal Federico Delgado. La denuncia la realizó una empleada del Senado, Claudia Mabel Guebel. Habrá que ver en más, qué es lo que sucede. Y es posible, tal vez, que se observe acaso lo que no sucede.
Por lo pronto, el gobierno se derrumba por la falta de credibilidad y la sucesión de mentiras que emite hace casi cuatro años. Descartes reflexionaba que “Es prudente no fiarse por entero de quienes nos han engañado una vez”.
Fuente: La Nación
