Agrotóxicos en Pergamino: Intendente desconoce fallo judicial que le ordena entregar agua potable en barrios fumigados
El intendente Javier Martínez (Juntos por el Cambio) se niega a suministrar agua potable a los vecinos de Pergamino afectados por la contaminación de la red de agua corriente como consecuencia de las fumigaciones.
Por Claudio Siniscalco
Este drama no es nuevo en Pergamino, a pesar de que la suerte electoral de Javier Arturo Martínez (debe su segundo nombre a la admiración que su padre sentía por Arturo Illia) parecería indicar que está todo bien en su distrito. «Ciudad sojera», dicen algunos, tratando de explicarlo.
Ya en 2018 se empieza a analizar el agua de red que provee el municipio y el agua de pozos domiciliarios. En abril de 2019, la Justicia dicta una medida cautelar que ordena al municipio la provisión de agua segura, a partir de conocer que el agua de consumo contiene 18 agrotóxicos en concentraciones altas.
La medida precautoria se amplía en junio, cubriendo a tres barrios: Villa Alicia, La Guarida y Luar Kayad. Los vecinos venían recibiendo el agua de manera regular, semana a semana, y al comenzar este mes, noviembre de 2020, se les cortó la entrega del elemento vital. La explicación de los repartidores fue que el intendente Javier Martínez había dado la orden.
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«Esto fue corroborado por la policía federal y denunciado por vecinos. Las querellas denunciaron incumplimiento en dos oportunidades, se intimó al intendente para que restituya el agua pero no lo hizo. Nosotros solicitamos que se aplique el artículo 239 del Código Penal», nos cuenta Sabrina Ortiz, vecina de Pergamino, abogada y una de las principales referentes del colectivo de ciudadanos que viene luchando desde hace tiempo contra el envenenamiento de la ciudad.
El artículo 239 que cita Sabrina dice que «Será reprimido con prisión de quince días a un año, el que resistiere o desobedeciere a un funcionario público en el ejercicio legítimo de sus funciones o a la persona que le prestare asistencia a requerimiento de aquél o en virtud de una obligación legal».
La grave situación fue denunciada en el Juzgado Federal Nº 2, a cargo del juez Carlos Villafuerte Ruzo. Sin embargo, las familias siguen en la misma situación. «Repudiamos este accionar que demuestra una vez más que a muchos funcionarios y al intendente no les importa nada la salud de los habitantes de la cuidad. En estos barrios se encontraron 18 agrotóxicos más una alta cantidad de arsénico en el agua de red, siendo no apta para consumo humano», denuncian los vecinos.
«Basta de indiferencia, de seguir perjudicándonos y sobre todo en este contexto de pandemia. Exigimos ya la restitución de AGUA para los barrios envenenados«. Con estas consignas, los vecinos se movilizaron ayer, lunes 16, frente a la municipalidad de Pergamino.
Los manifestantes no fueron atendidos, y la policía tenía una orden expresa de no dejar entrar a Sabrina Ortiz. «Pareciera que en Pergamino, para algunos funcionarios y representantes de instituciones del agronegocio el que yo sea MUJER es una condición de inferioridad, parece que el «machirulismo» no tolera que me oponga a sus mandatos, que desobedezca sus órdenes y que me revele ante el envenenamiento sistemático que nos causan. Tienen que ningunearme, atacarme, perseguirme y maltratarme de mil formas, como lo vienen haciendo. No soportan que una MUJER luche», denuncia Ortiz, que advierte que «mientras más intenten callarme, más fuerzas me dan».
Mientras tanto, el intendente que debe su segundo nombre a Arturo Illia permanece en silencio. Hay mucha incertidumbre. La gente quiere saber que pasó y por qué no recibe más el agua. Hay angustia por no poder comprar el agua que necesitan. Hay pacientes de riesgo, gente que vive al día. Las mascotas se enferman, pero también hay personas enfermas por el envenenamiento.
Ciudad sojera, agronegocios, complicidades y silencio. Lo demás, no importa nada.
