En un encuentro que reunió a representantes de veinte de los veinticuatro distritos electorales del país, los dirigentes del Partido MNA-FORJA resaltaron el orgullo que significó haber formado parte de un proyecto que sacó a la Argentina de una de las crisis más profundas de su historia y promovió la inclusión social, la generación de empleo y la recuperación de la dignidad y la autonomía nacional.
Más adelante, como conclusión del debate, este espacio político expresó que “las elecciones del 22 de noviembre ratificaron que ha quedado atrás definitivamente el bipartidismo y se ha desembocado en un escenario de bifrentismo que, por un lado, reúne a quienes pretenden tercerizar el Estado en manos de los CEO de las corporaciones económicas y, por el otro, a quienes creemos profundamente en la herramienta de la política como instrumento de un profundo cambio en la distribución del ingreso para favorecer a los sectores de menores recursos y, a la vez, alimentar el círculo virtuoso de una economía apoyada en el trabajo y la producción”.
El Partido MNA–FORJA seguirá de cerca la evolución de las políticas públicas en todos los órdenes del quehacer nacional, provincial y municipales, custodiando los derechos de todos los argentinos alcanzados a lo largo de los 32 años de democracia
Los dirigentes del agrupamiento MNA – FORJA, Leopoldo Moreau y Gustavo López encabezaron este encuentro que contó con la presencia del ex diputado nacional saliente Eduardo Santin y del diputado entrante Juan Pereyra, que pasará a representar a esta agrupación con un monobloque en la Cámara de Diputados de la Nación. También asistieron legisladores provinciales, concejales, intendentes y militantes juveniles vinculados a este nuevo espacio político, que tiene personería como partido nacional y en siete provincias argentinas.
Se convino que en los primeros meses del año que se inicia, el Partido MNA–FORJA seguirá de cerca la evolución de las políticas públicas en todos los órdenes del quehacer nacional, provincial y municipales, custodiando los derechos de todos los argentinos alcanzados a lo largo de los 32 años de democracia, y se pondrá particular acento en obtener la personería distrital en aquellas jurisdicciones, como es el caso de provincia de Buenos Aires, donde todavía resta completarla.