La ONU denunció las restricciones fronterizas para refugiados
Los organismos para los refugiados (ACNUR) y la infancia (UNICEF) denostaron las nuevas restricciones que padecen los refugiados en su marcha por los países de la región de los Balcanes occidentales hacia el centro y norte de Europa.
Adrian Edwards, portavoz del ACNUR, denunció que en los puestos fronterizos las personas son filtradas de acuerdo con sus nacionalidades y sólo se permite la entrada de sirios, iraquíes y afganos, que integran el grueso de los cientos de miles de refugiados y migrantes llegados a Europa por mar en lo que va del año.
Esta situación aumenta las tensiones entre las miles de personas que están en las proximidades de la frontera sin poder avanzar, que además son afectados por las bajas temperaturas que suponen un riesgo adicional, particularmente para los niños, agregó el vocero.
Las restricciones fronterizas adoptadas en las últimas horas hacen aún «más insostenible» la situación de los refugiados «desde cualquier punto de vista, sea humanitario, legal o de seguridad.
Unicef en tanto, se refirió a la limitada capacidad para alojar en su ruta a los que llegan, particularmente si el flujo se ralentiza y se forman enormes grupos de personas sin posibilidades de avanzar.
En estas circunstancias, los niños que viajan solos son una preocupación primordial, dijo la portavoz del organismo, Sarah Crowe, tras precisar que en esta situación están 24.000 niños que consiguieron llegar hasta Suecia sin familiares y entre 30.000 y 50.000 que entraron en Alemania, países donde solicitaron refugio.
«Mientras no haya una buena capacidad de recepción y registro, los únicos que controlan la situación son las redes de traficantes, cuyas actividades sin escrúpulos costaron la vida de 3.500 personas que se ahogaron en el Mediterráneo este año», concluyó Edwards.
ACNUR alertó que Macedonia había cerrado su frontera con Grecia y no permitía el paso de refugiados ni migrantes, que Eslovenia hizo los mismo con los emigrantes provenientes de Croacia y que Serbia limitó el paso por su territorio a sirios, iraquíes y afganos además de rechazar a africanos y asiáticos.