La experiencia que pertenece a la historia familia del Arquitecto Alejandro Luis Pajor, Cónsul Honorario de Hungría en el Chaco, detalla cómo su abuelo logró afrontar los duros momentos de lo que se conoce como la diáspora húngara, en suelo argentino.
El siglo XX y los movimientos migratorios es una parte vital de la construcción colectiva de sociedades como la de nuestro país. Pajo, cuenta la referida a su ascendencia húngara y cómo hoy esto trae aparejadas implicancias culturales profundas en la reconstrucción identitaria de esa Hungría dispersa y personificada por quienes conservaron los vínculos con sus tradiciones, costumbres y el siempre vigente anhelo de volver.
Así es como el Arquitecto, Pajor, comentó públicamente que «El día 8 de septiembre de 2020 hemos organizado, junto al Becario Sr. Martí Tibor y en el marco de nuestras Charlas sobre Historia y Cultura Húngara; la intervención del Sr. Director General del Skanzen Múzeum de Szentendre, Dr. Cseri Miklós; ya que una Casa de inmigrantes húngaros construida en 1917 está siendo trasladada junto a decenas de herramientas de labranza agrícola, elementos de transporte antiguas, piezas muy antiguas de vida cotidiana (muebles, vajillas, cubiertos, artículos de la vida cotidiana de aquellos años).
Se está trasladando trozos de pisos, las puertas y ventanas de aquella casa, trozos de muros de adobe y todo lo necesario para reconstruirla exactamente en el Skanzen»
Un tesoro histórico en Villa Ángela, Chaco
Pajor, también explicó que «Los Directores del Museo viajaron varias veces a Villa Angela para realizar este trabajo de recolección, clasificación de objetos originales y nosotros le brindamos la mejor colaboración profesional que pudimos ofrecerles.
Se han confeccionado los planos de arquitectura que aquella Casa nunca tuvo. Es decir, fue una construcción como se llama, “de arquitectura popular”, con las ideas y nociones de distribución espacial que nuestros abuelos tenían en aquella época, ellos y casi todos los inmigrantes húngaros tenían vocación de agricultores y eso era lo que sabían hacer, no eran constructores ni diseñadores de casas. Pero tenían la clarísima idea y la creatividad necesaria para construir una casa que debía cubrir necesidades de vida diaria basada en el trabajo y generar los medios para su manutención, comida y descanso, en medio del campo agreste e inóspito adonde llegaron en aquellos años»
Comentó que «Ese día, durante la Charla, pudimos contar con la valiosa presencia y las palabras del Sr. Embajador de Hungria en la Argentina, Dr. Gelényi Csaba, tuvimos el honor de que haya aceptado gentilmente en intervenir y poder relatar los innumerables papeleos burocráticos que se debió afrontar, pero lo más importante es que pudimos escuchar la voz oficial sobre el valor cultural e histórico de este hecho; su significancia e importancia para Hungria y para la Argentina. El dijo que “este es un este gesto enorme hacia la diáspora chaqueña en particular, pero también para toda la diáspora argentina”.
El cónsul en el Chaco, dijo: «A la vez, hemos logrado sumar la intervención de un especialista y experto en la diáspora chaqueña, como el Sr. Zsonda Márk, (antropólogo cultural), quien como Becario durante seis años visitó periódicamente nuestra ciudad y Du Graty conviviendo con todos nosotros durante largos seis meses de cada año y ha conocido y visitado cada Chacra, cada Casa y cada Familia húngara en esta zona. Por lo que ha conocido tanto y ha podido contribuir mucho, mucho en esta objetivo de reconstruir un ejemplo de la vida diaria de los húngaros chaqueños en el Skanzen Szentendre Múzeum como una muestra del espíritu húngaro chaqueño. No hay mejor modo de manifestar la vida diaria de un ser humano, que mostrar su casa, su hábitat»
Pajor, consideró ese acontecimiento como «un día muy especial para nosotros. Pudimos convocar desde nuestra ciudad -tan lejos de los centros urbanos importantes- a tantas personalidades en un solo evento virtual, que nos llena de satisfacción. La Señora Presidente de la Federación de Entidades Húngaras de la Argentina, Arq. Redl Isabel nos entregó en su intervención; palabras muy profundas que hacen al sentimiento húngaro. Nos habló sobre la importancia de que los hombres y mujeres de la Nación Húngara dispersos por todo el mundo, nunca dejen de trabajar intensamente por ese sentimiento, siempre con la mirada puesta en los valores húngaros»
La presencia de Luis Landriscina
Concluye con respecto a lo sucedido: «pudimos también convocar al famoso humorista y cuentista argentino, Señor Luis Landriscina, hijo de Villa Angela, hijo de inmigrantes italianos pero criado en una casa de inmigrantes españoles en nuestra ciudad. Alguien que, con sano humor y profunda poesía a lo largo de sus 85 años de vida, ha difundido como nadie en la Argentina (y en varios países del mundo), la cultura inmigrante de la Provincia del Chaco; una Provincia formada y desarrollada gracias al arduo trabajo de los inmigrantes europeos (principalmente del centro de Europa) que llegaron aquí cuando nada de nada había. Ni ciudades (solo algunas), ni caminos, ni servicios públicos, ni bancos, nada… solo montes y tierra vírgen para trabajarla. A eso vinieron: a trabajar y a formar un Provincia.
Don Luis, como tiernamente se lo llama en Argentina, relata la historia-inmigrante del Chaco en sus cuentos y poemas de manera magistral y nos pudo deleitar con sus palabras y anécdotas.
Por todo eso; por la compañía de decenas de amigos que ya conforman una audiencia “fija” diríamos de nuestros Martes de Historia y Cultura Húngara, estamos felices y satisfechos por esta tarea que nos encanta realizar para mostrarnos, poder contar dónde estamos y quiénes somos y de dónde venimos» expresó el arquitecto.