Con el Brexit se cae el Acuerdo de Madrid, estatuto del coloniaje
En la medianoche de hoy, con la salida de Gran Bretaña de la Unión Europea, lo que llaman Brexit, se inicia un tiempo promisorio para la Argentina y aquellos países que sufren, parcial o totalmente, el vasallaje británico. La etapa Menem, con el Pacto de Madrid (febrero de 1990), sometía al país bajo los efectos de la guerra de Malvinas, y entregaba los recursos naturales al punto de darles nuevo status constitucional. Incluso se diseñaba, además, el retorno de la Capital Federal a los términos del mitrismo que hoy presenta.
Escribe Alejandro C. Tarruella
Aquel tratado dio por tierra con la Argentina soberana, industrial, tecnológica, científica que disponía de sus recursos naturales y servicios públicos. La regresaron a su etapa oligárquica de proveedor de granos, haciéndola transgénica, semilla-dependiente y química-fumigada liberando el uso de la tierra a las corporaciones. Fue así, hasta la actualidad, la Argentina sometida al monocultivo, con los servicios y los recursos naturales en manos privadas.
A su vez, la FICZ (zona de exclusión pesquera de 150 millas alrededor del perímetro de las Islas Malvinas, establecida unilateralmente por la corona en febrero de 1987 y ampliada a fines de 1993) que mantuvo Menem significó, según se estima, el saqueo de recursos pesqueros argentinos por sumas que alcanzaron a más de 150 mil millones de dólares, lo que permitió a los habitantes de Malvinas tener uno de los ingresos per cápita más altos del mundo, superando incluso a los norteamericanos.
Ahora, el Reino Unido se va de la Unión Europea a 47 años de haber llegado en días en que el grupo Rotschild rediseña sus pautas financieras en París, Shangai y Frankfurt. El primer ministro Boris Johnson logró en primera y segunda vuelta parlamentaria, profundizar un acuerdo que cuenta con rechazos, observaciones y deja heridos en el camino.
Los británicos son 66 millones de habitantes, un 13 por ciento del Producto Bruto Interno de la Unión Europea, que sufre ahora la reducción de la OTAN por la falta de apoyo Estados Unidos en virtud de las políticas de Trump
Recién en mayo próximo, una Conferencia sobre el Futuro de Europa va a intentar un rediseño de los términos de los países que la integran.
Lo que vendrá
Las dudas que existen sobre los territorios de ultramar británicos, apropiados por la corona que inicia hoy el Brexit, se extienden a Gibraltar, que van a reclamar los españoles, y otros territorios que son en total 14 y contaban con un acuerdo no explícito de la Unión Europea en un amparo de continuidad colonial. Por el contrario, Gran Bretaña ahora deberá vérselas con Escocia, Gales e Irlanda del Norte, donde existen vientos libertarios.
Malvinas precisa ayuda de la metrópoli londinense en menor medida que otros territorios, y tiene el problema de que cerca de un 80 por ciento de sus exportaciones van a España, territorio europeo
La corona tenía 22.800 hectáreas de reservas que podían ser arrendadas y la mayor parte de la tierra está dividida en escasas grandes granjas. Prácticamente la mitad tiene a la Falkland Islands Company como propietario. Está claro que los dueños de las tierras en las Islas no las habitan y han colonizado hasta el poder político para sostener derechos insostenibles.
Hay resoluciones de Naciones Unidas que aventajan a la Argentina a la hora de los reclamos. La Resolución 2621, del 12 de octubre de 1970, ratificó una clara condena al colonialismo y a las entidades y los grupos interesados en sostenerlo. Las argumentaciones y resoluciones favorecen en gran medida a los intereses nacionales. Hasta la convención de San Lorenzo de 1790, cuando la única presencia en las Islas era la de España, la reconocía por parte de la corona británica, como la única válida. Aquel tratado, daba lugar a una apertura nada más que a los fines de la navegación de los mares del Sur para los ingleses respecto a Malvinas. También favoreció a la Argentina la Resolución 2065 de la ONU, de diciembre de 1965, que cuestionaba el colonialismo.
El camino a la recuperación a emprender por Argentina, es de negociación en virtud de los nuevos días en un concierto internacional que rediseña sus acuerdos en un marco multilateral, como se remarcó en el reciente cónclave de Davos.
El gobierno de Alberto Fernández tendrá en sus manos la apertura de un tiempo histórico político, cuyo horizonte es la recuperación soberana de los territorios y la estructura jurídica que se entregó en 1990. Ese es el camino auspicioso que abre el Brexit para el país