Asediada por la crisis, Garbarino puede quedar en manos del macrista Stanley
Condenada al fracaso por la crisis del consumo, la cadena de electrodomésticos Garbarino podría terminar en manos de una sociedad que integra Guillermo Stanley, el padre de la ex ministra de Desarrollo Social del gobierno macrista Carolina Stanley.
En agosto, Garbarino logró un acuerdo para saldar pasivos por $ 4.400 millones y así el 85% de la firma quedó en manos de los bancos Galicia y Santander, que tomaron las acciones de la empresa con un mandato de venta como garantía.
De acuerdo a fuentes del sector, los bancos tienen decidido vender su parte y uno de los interesados es el fondo Inverlat cuyos socios son Carlos Giovanelli, Guillermo Stanley y Damian Pozzoli, quienes tienen en su poder la fábrica de alfajores Havanna.
Garbarino pertenece a los hermanos Daniel y Omar Garbarino y debía afrontar una difícil situación: pagar una deuda millonaria en medio de la imposibilidad de recaudar por la brutal caída del consumo.
En este contexto, los empresarios que llegaron al poder con Cambiemos ahora pueden aprovechar la crisis para hacerse con una firma histórica de la Argentina.