La abrupta suba del dólar, tras el rotundo triunfo de Alberto Fernández en las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), significó un duro golpe a la economía local, que ya venía afectada por la caída de la producción y la baja del consumo. Ante el panorama desolador, se perdieron las referencias de precios, por lo que están fallando las cadenas comerciales.
Alberto Guida, presidente de la Cámara Argentina de Distribuidores y Autoservicios Mayoristas (Cadam), informó que “hay una suspensión generalizada de ventas por parte de las empresas proveedoras”. En diálogo con Infobae, advirtió que desde el lunes no se pueden realizar nuevos pedidos y a los que estaban pendientes de entrega “se le quitaron los descuentos que estaban previstos”.
Por su parte, Víctor Fera, dueño del supermercado mayorista Maxiconsumo, decidió no hacer nuevos dado que implicaría convalidar subas de precios de hasta el 20 por ciento. “Los productos que están pendientes de entrega, los están entregando (los fabricantes) a regañadientes, quejándose; pero nuevos pedidos hoy no, porque si te van a levantar nuevos pedidos te van a hablar de listas con el 20 por ciento y uno no se puede apresurar enloquecidamente”, aseguró en diálogo con Radio Continental.
En tanto, el presidente de la Cámara de Comercio Automotor, Alberto Príncipe, aseguró que los fabricantes de autos dejaron de proveer a los concesionarios: “El auto es dólar. A los insumos importados hay que sumarle que las autopiezas que se hacen acá tienen a su vez insumos importados. Las fábricas pararon las ventas, no tienen listas de precios actualizadas. Mi concesionario hace exactamente lo mismo porque si no tiene lista de reposición, es decir, no sabe si después va a tener que reponer al doble un vehículo igual”.
En esa línea, el presidente de la Federación Argentina de la Industria Molinera (FAIM), Diego Cifarelli, advirtió que el problema del desabastecimiento comenzó a plantearse en el rubro del pan. “Estamos esperando que la cuestión (del valor del dólar) se estabilice; no espero ni que retroceda ni avance, sino que se estabilice para poder trabajar”, reveló.
La consecuencia podría ser una paralización del comercio, con sus efectos recesivos sobre la economía, y un fuerte desabastecimiento de productos esenciales.
