En el marco de su plan de retirarse de la Argentina, Alpargatas vende su planta de Catamarca, donde trabajaron 480 empleados y ahora solo lo hacen 90. Desde el gremio esperan que la venta sea con continuidad laboral.
En 2018, en medio de la profunda crisis industrial en la que todavía está envuelta la Argentina y que golpea particularmente al sector textil, la empresa Alpargatas decidió darle un giro a su negocio en Argentina y comenzó un fuerte ajuste.
Según reseña BAE Negocios, Alpargatas ya cerró tres plantas ubicadas en Catamarca, Chaco y La Pampa y pasó de tener 3.700 empleados en 2015 a menos de un tercio. Ahora retoma el ajuste, vende su planta textil catamarqueña y se va de la provincia.
La decisión está tomada, seguirán desinvirtiendo en el área textil y concentrarán su operación en Tucumán. Operarán con las marcas Topper, Havaianas y Misuno, solamente. La compañía está ultimando los detalles para la venta de su planta textil, lo único que le queda en Catamarca, que actualmente tiene 90 empleados que fabrican trapos de pisos y rejillas.
Jorge González, secretario General de la Asociación Obrera Textil de la provincia le explicó a BAE Negocios que «la situación textil en la provincia es muy grave, perdimos 2.300 puestos de trabajo en el último año. Todo se complicó hace un año y ocho meses. Calzados Catamarca supo tener 810 trabajadores hace un año y medio y en 2018 cerró. La textil que hoy se vende tenía 480 empleados y hoy apenas 90».
Y agrega que «esperamos que la empresa que compre la planta no despida, respete la ley 20744». El comprador sería la empresa Fibran Sur, fundada hace 57 años por Norberto Rodríguez y hoy continuada por José Rodríguez.