Alejandro Tarruella: Desempleo en la Patagonia, las cifras que esconde el gobierno
El discurso oficial opera en estos días sobre la necesidad y suele sustituir la realidad apelando a la ilusión. Mientras entra en disolución el Estado de Derecho, ministros como Peña y Triaca, venden el humo del crecimiento industrial, la presunta generación de empleo mientras los servicios de inteligencia salen de fungir como falsos militantes que, a palo y palo, ensucian la multitudinaria marcha del viernes que clamó por la aparición con vida de Sergio Maldonado. Así quedan opacadas la foto de la Plaza de Mayo colmada de ciudadanos, la avenida de Mayo, la Diagonal Roque Sáenz Peña y la Sur, más las calles adyacentes, donde era imposible dar un paso el viernes a las 18 hs. Y queda oculta la caída del empleo en la Patagonia. Por datos oficiales del Ministerio de Trabajo, se sabe que entre diciembre de 2015 y junio pasado, en la Patagonia los empleos privados registrados (en blanco) pasó de 431.800 a 397.300. Eso indica que registraron 34.500 menos, y la caída presentó un alarmante 8% en dieciocho meses de gobierno de Cambiemos y Mauricio Macri.
El diario “Jornada”, de la provincia del Chubut, informó de una pérdida de 4.700 empleos dispuesta del siguiente modo. En diciembre de 2015 dicha provincia presentaba 101.400 empleos en blanco y en la actualidad, hay ahora 96.700, con una caída acumulada de 4,6%. Se supone que Chubut registra las cifras más bajas porque, en Tierra del Fuego, cayeron 8.200 puestos de trabajo, 19% del empleo encuestado en diciembre de 2015. Alarmante.
Por datos oficiales del Ministerio de Trabajo, se sabe que entre diciembre de 2015 y junio pasado, en la Patagonia los empleos privados registrados (en blanco) pasó de 431.800 a 397.300. Eso indica que registraron 34.500 menos, y la caída presentó un alarmante 8% en dieciocho meses de gobierno de Cambiemos y Mauricio Macri
A Tierra del Fuego le sigue Santa Cruz a la que Cambiemos somete a una suerte de despojo gradual y constante por obvias diferencias políticas. Desde la llegada de Mauricio, el empleo en blanco se derrumbó 11,2% desde y de 64.100 puestos hay hoy 56.900, eso quiere decir que 7.200 trabajadores perdieron su empleo.Río Negro tiene a su vez su calvario y 109.100 trabajadores quedan 101.400. El Ministerio de Trabajo, vaya contradicción, oficializa que se perdieron allí más empleos que en Santa Cruz: un total de 7.700, y su cifra asciende al 7%.
La provincia del Neuquén, gobernada por el histórico Movimiento Popular Neuquino, que ahora es aliado, entregado a Cambiemos, es tradicionalmente el mayor generador de empleo de la Patagonia. Su alianza no le impidió sin embargo, caer en el desempleo paulatino y si tenía 114.100 trabajadores registrados, ahora cuenta con 107.400, 6.700 trabajadores menos, y una caída porcentual de 5,8%.
Conflictos y perspectivas
Si un gobierno tiene como metas sin discusión endeudarse en dólares, reventar la deuda externa para financiarse, importar a destajo y dar beneficios sin límite a las corporaciones, es natural imaginar y luego comprobar que la caída del empleo es en picada. Si el derrumbe del empleo es el la Patagonia, lejana de la visión de republiqueta de Buenos Aires, cuentan con la ventaja de que los medios no dan mayor relevancia a su realidad. Si para muestra sobra un botón, obsérvese lo ocurrido luego de la tormenta de vientos en el sur que destruyó instalaciones de viviendas, escuelas y otros, sin que tuvieran mayor repercusión en los medios de la ex capital.
En Chubut, en junio se recuperaron 600 empleos, es cierto, pero no alcanza para comenzar a revertir la situación porque fue la única ocasión luego de seis meses de caídas repetidas, en que se dio una situación semejante. Río Negro y Tierra del Fuego vieron caer 100 empleos por mes en cada una de ellas.En Santa Cruz cayeron800 empleos en junio respecto de mayo.
Solo Formosa, en cifras oficiales, muestra una caída del nivel del empleo registrado en torno al 8%.Allí, sacudido por la inacción nacional, apelando a gobernar con sensibilidad, el gobernador Gildo Insfran, acaban de concluir un Congreso Pedagógico en el que reafirmó una cultura y un camino político, que reforzó en un gesto de afirmación de un destino nacional y regional. Con inversión propia de la provincia, con convicción y enfrentando al centralismo unitario que parece regresar a 1826.
El miércoles, cuando los gobernadores justicialistas se reúnan para reclamar la coparticipación, los dolores de las provincias y sus demandas, volverán a expresar al país real que se procura desechar y acallar. El desempleo es un camino para herir a un país desde la base misma de los trabajadores, sus familias y el conjunto de la comunidad.
Informe: INFOGei (La Plata)