Vidal ya tiene vía libre para despedir en la Provincia
Decreto mediante, la Gobernadora se desligó del rol de mandataria para evadir las problemáticas diarias de los bonaerenses, delegó responsabilidades a su Gabinete, y dejó el camino allanado para despedir a trabajadores estatales.
María Eugenia Vidal ya no sabe que hacer para desligarse de la responsabilidad de gobernar la provincia más importante, el motor del país, Buenos Aires. Es de público conocimiento que los altercados que se le presentan a la gobernadora la llevaron a una reclusión plena en su despacho y evita asumir conflictos. Por ello, en sus poco más de cien días en el cargo tomó la decisión de no dialogar con intendentes opositores y que le presenten problemáticas a soluciona.
Verónica Magario, Jefa Comunal de La Matanza, y Mario Secco, de Ensenada, dieron cuenta de estos problemas y aseguraron que la gobernadora no los quiere atender.
Desde el entorno íntimo del Ejecutivo provincial aseguraron que la pupila de Horacio Rodríguez Larreta sufre ataques de pánico constantes. No obstante, la decisión truncada de mudarse a una base militar por motivos de seguridad y la posterior separación de su marido, el intendente de Morón, Ramiro Tagliaferro, empeoró el panorama bonaerense.
En los últimos días, y para evitar que los rumores de una renuncia de Vidal continúen tomando fuerza, sus asesores le acercaron la idea de delegar responsabilidades. Es así, que la Gobernadora tuvo la brillante idea de descentralizar tareas y dotar de súper poderes a todos los miembros del gabinete provincia, ya sea ministro, secretarios, o titulares de los organismos de la constitución. No sólo delegó tareas, sino que allanó el camino para incurrir en despidos masivos que hasta el momento no logró.
Con la misma impronta que el presidente Mauricio Macri, Vidal evadió al Congreso de la Provincia de Buenos Aires y firmó el decreto 230/16, el pasado 28 de marzo, para delegar “el ejercicio de una serie de facultades atribuidas a la Gobernadora”.
Entre las aptitudes administrativas descriptas en el decreto, se encuentran la habilitación para “dar intervención al Fiscal de Estado para la promoción de acciones judiciales; aclarar errores materiales incurridos en Decretos; y aprobar convenios de avenimiento que tengan por objeto la adquisición del dominio, constitución de servidumbres administrativas o la ocupación temporaria de inmuebles”, según detalla un informe publicado por ANDigital, que da cuenta de las facultades delegadas.
Los integrantes del Poder Ejecutivo podrán “fijar el precio de venta y la forma de pago de los inmuebles afectados al régimen de colonización”, como así también “conceder prórrogas y aceptar amortizaciones extraordinarias”, al tiempo que estarán facultados para “otorgar permisos y concesiones de uso sobre inmuebles afectados al uso de sus respectivos ministerios y/o reparticiones autárquicas de su dependencia”.
También estarán en condiciones de dar soluciones a “reclamos de deuda por desvalorización monetaria y reconocimiento de intereses”, y se los habilita para incorporar al patrimonio fiscal “vehículos automotores”, además de otorgar concesiones provinciales para “servicios de Transporte Público de Pasajeros”, lo que implica autorizar la extensión, ramificación, desdoblamiento o modificación de recorridos.
Otras de sus facultades serán “autorizar transferencias de la titularidad de servicios públicos de autotransporte de pasajeros” y, en lo que representa uno de los puntos más controversiales, “autorizar la realización de obras hidráulicas menores en terrenos de propiedad del solicitante”, al igual que disponer de la autorización del abono de deudas mantenidas con la Provincia “en concepto de canon por ocupación de tierras fiscales”.
La mandataria provincial también consignó a los actores mencionados anteriormente una serie de facultades en materia de personal atribuidas a su cargo, como “designar agentes comprendidos en otros regímenes estatutarios especiales, con excepción del personal de planta permanente con estabilidad y del personal sin estabilidad”.
A su vez, podrán disponer “los ceses de personal excluido de planta permanente sin estabilidad y los supuestos de pasividad anticipada” es otro de los puntos establecidos, que incide directamente en la ocupación y desocupación del agente estatal. A su vez, estarán legitimados para “ampliar suspensiones preventivas y disponibilidades relativas”, otorgar licencias, disponer ascensos, traslados de agentes dentro de cada jurisdicción y consignar “calificaciones del personal”. Es decir, Vidal se armó un decreto a medida para avanzar con cientos de despidos masivos.
No es la primera vez en la que la mandataria bonaerense aprovecha el blindaje mediático para, desde las sombras, hacer uso y desuso de la constitución a su gusto. A días de asumir ordenó el cierre de la Secretaría de Niñez y Adolescencia, como la perdida de jerarquía del Instituto Cultural, entre otras medidas de desguace del Estado.
En esta oportunidad, Vidal y el pánico, tomaron la decisión de desligarse de las responsabilidades asumidas el 10 de diciembre y girar sus responsabilidades al gabinete. En el medio quedan los bonaerenses a la espera que la Gobernadora asuma el rol de mandataria y sea la cara de las decisiones políticas del proceso neoliberal que conduce junto a Mauricio Macri.