OpiniónPrincipales

Mauricio, fiel heredero de Bernardino

A los escépticos de siempre, a los que desconfían de todo, a los quejosos que reclaman medidas urgentes, a esos les digo: no es para nada sencillo retroceder doscientos años en tres meses. Perdón, estoy exagerando: son 192 años. Pero bueno, ocho años menos no le quita ningún mérito.

Escribe Claudio Siniscalco, especial para InfoBaires24

Les decía que no es para nada fácil. Pero este gobierno, sí, el de Mauricio, está a punto de lograrlo. Claro que para eso necesita la ayuda del Congreso. Tampoco puede alcanzar él solo el ansiado logro de reinsertarnos en el mundo.

Habalndo en serio. En 1824, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, General Martín Rodríguez, por iniciativa de su Ministro de Gobierno y relaciones Exteriores, Bernardino Rivadavia, gestionó un préstamo por un millón de libras esterlinas ante la compañía británica Baring Brothers.

¿Cuál sería el destino de ese dinero? Financiar lo que hoy llamaríamos obra pública o proyectos de infraestructura. Según señala el historiador Felipe Pigna, “el empréstito se contrataba con el objetivo de crear pueblos en la frontera con el indio, fundar un Banco, construir una red de agua y un puerto. Los gestores fueron: Braulio Costa, Félix Castro, Miguel Riglos, Juan Pablo Sáenz Valiente y los hermanos Parish Robertson y en su conjunto se llevaron 120.000 libras del monto total del crédito en carácter de comisión”.

“Descontadas las comisiones de los seis gestores –continúa Pigna-, dos de los cuales eran ingleses, los gastos de emisión y varias cuotas adelantadas, llegaron a Buenos Aires sólo 570.000 libras, la mayoría en letras de cambio sobre casas comerciales británicas en Buenos Aires, propiedad de los gestores del empréstito. Pero la deuda se asumía por el total: 1 millón de libras”.

Las obras nunca se realizaron, y para 1904, cuando se terminó de pagar el crédito, la Argentina había abonado más de diez veces el monto original de la deuda.

El préstamo de Baring Brothers también estaba destinado a lo que hoy llamaríamos obra pública o proyectos de infraestructura

Bartolomé Mitre, político, militar, escritor y periodista, gobernador de la provincia de Buenos Aires, presidente de la Nación y fundador del diario La Nación, calificó a Rivadavia como “el más grande hombre civil de la tierra de los argentinos”.

El general José de San Martín, que no necesita presentación, decía sobre Rivadavia: “Su administración ha sido desastrosa y solo ha contribuido a dividir los ánimos. Yo he rechazado tanto sus groseras imposturas como su innoble persona”.

El préstamo de la Baring Brothers fue nuestra deuda externa más larga y uno de los casos más emblemáticos de la peor corrupción, la que se practica en contra de los intereses de un país y en beneficio de un puñado de personas. Además, marcó el perfil de nación dependiente y endeudada que nos definiría en grandes tramos de nuestra historia. Pero no sería el último caso.

La colosal deuda externa generada por la dictadura de Videla-Martínez de Hoz puede mencionarse como el segundo ciclo histórico de apertura y endeudamiento externo como sinónimos de “integración al mundo”. Cuarenta años después, todavía sufrimos sus consecuencias.

¿Estamos en presencia del tercer ciclo? Si es así, ¿podemos evitarlo? Además, ¿es posible reivindicar al mismo tiempo a San Martín y a Mitre? Si quisiéramos formarnos una opinión sobre Rivadavia, ¿en cuál de los dos confiaríamos?

Colabora con Infobaires24
Suscribite a nuestro canal de youtube TIERRA DEL FUEGO

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba

Tiene un bloqueador de publicidad Activo

Por favor desactive su bloqueador de anuncios, Infobaires24 se financia casi en su totalidad con los ingresos de lass publicidades