«Queremos un Estado sin la grasa de la militancia»
El ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat Gay, declaró en conferencia de prensa que el Gobierno Nacional quiere «un Estado sin la grasa de la militancia», en mención a los miles de despidos de empleados estatales en el último mes, asegurando que se encontraron con un «Estado bobo».
«Queremos un Estado sin la grasa de la militancia», sostuvo el funcionario macrista, en despectiva alusión al reclamo por los despidos estatales.
Sobre el impacto de la gran subida de precios del último mes, Prat Gay se justificó hablando de «herencia recibida» y afirmó que «la inflación, debido al impacto de la salida del cepo y del arrastre de la suba de precios de los últimos años, tuvo un salto en diciembre y enero». En ese sentido, alertó sobre el nivel del déficit fiscal global, que estuvo en el orden del 7 por ciento, «el más alto de los últimos 30 años».
El ministro reconoció que hubo «un aumento desmedido de algunos precios», pero advirtió que «este es un gobierno que se está ocupando y está teniendo un resultado visible». Según las estimaciones difundidas en conferencia de prensa, «el nivel de inflación es similar al de septiembre» y eso se interpreta como «parte de la herencia, con precios relativos desajustados que había que corregir».
Sin embargo, las medidoras privadas estiman una inflación similar a la del año 2002, en plena crisis política, económica y social del país.
«Hubo una pequeña joroba de dos meses por la salida del cepo, que no tuvo ni por asomo el impacto de lo que decían que iba a tener», indicó Prat Gay, tras lo cual anticipó que desde el gobierno nacional van a avanzar con una estrategia que «no sean el guante de box ni la extorsión de Guillermo Moreno, ni la ley de la selva, sino un punto intermedio» concluyó.