Victor Hugo: “Macri me ofreció una vez la secretaría de Cultura de la Ciudad”
El periodista relata en su libro Mentir a Diario sus encuentros con Cristina Fernández, el presidente y explica por qué el kirchnerismo perdió las elecciones. ¿Qué pasa con la ley de medios?
Daniel Scioli perdió las elecciones con Mauricio Macri con una diferencia de poco más de 400 mil votos. ¿Fue derrotado por los medios de comunicación en contra, por la meseta económica en que había quedado la Argentina tras años de crecimiento o se perdió la batalla cultural? Todos estos debates son los que trata el libro Mentir a diario (Colihue), una conversación entre Victor Hugo Morales y Mateo Grille.
El libro tiene una estructura particular: es un intercambio de mails que desata el contrapunto. No sólo trata la derrota circunstancial del proyecto kirchnerista, también aborda los primeros meses del gobierno de Mauricio Macri: devaluación, despidos, clausura de la ley de medios, pago a los fondos buitre.
El título de esta nota es quizá una provocación. Victor Hugo cuenta que fue tentado a ocupar el cargo de secretario de Cultura de la Ciudad, pero que no aceptó en gran medida por su ideología. El ministerio fue dirigido durante años por Dario Lopérfido, un hombre vinculado a la élite cultural –entendida como exclusiva, no como talentosa- que oso decir que “los desaparecidos no fueron 30 mil”. Rarezas.
El recuerdo de esa propuesta es una gran significación política. Entre otras cosas, devela la falta de equipo que tenía Macri al momento de asumir el gobierno de la Ciudad. Victor Hugo también revela los entretelones de sus charlas con Cristina Fernández y el nerviosismo que sintió al ser nombrado como referente en una charla en la Plaza de Mayo cuando se pedía la liberación de Milagro Sala por protestar en la calle.
“Nunca dejaremos de funcionar dentro del capitalismo. Una revolución como la cubana es impensable y lo antropológico, el hombre bestial, egoísta, no ha sido dominado por ningún régimen de manera absoluta”, en este pasaje del libro, Victor Hugo intenta explicar el funcionamiento del ser humano, como eslabón, dentro de la cadena que son los movimiento sociales.
¿Cómo enfrentar al capitalismo siendo un gobierno democrático? Los gobiernos deben ser reelectos y para ser conocidos tienen que lucrar, ceder al poder, ser un poco capitalistas.
Victor Hugo y Grille retoman las fábulas del capitalismo que hace desearlo hasta los pobres. La hegemonía se logra cuando un pobre defiende los intereses de los ricos al suponer que algún día podrá estar en ese lugar. Ese pensamiento rompe con la cadena del movimiento social.
“Tenemos que ponernos la camiseta a la que pertenecemos. Somos todos pobres. Y cuando nos demos cuenta que somos pobres y que somos muchos, van a empezar a temblar ellos”, decía la hermana de Luciano Arruga en un discurso que dio al luchar por la aparición del cuerpo de su hermano. Ese razonamiento es quizás el que plantea Victor Hugo: La conciencia de clase que permite no dejarse llevar por los cantos de sirena del capitalismo.
El libro cuenta con pesimismo la apropiación de los medios y el fracaso de la implementación de la ley de medios, en parte, por las cautelares de la justicia. La obra deja en claro que los movimientos populares luchan en una batalla desigual. ¿Cómo se podrá vencer?
