A diferencia de Argentina, en España los Panamá Papers siguen siendo un escándalo
Mientras que en nuestro país el presidente Mauricio Macri está blindado mediáticamente, en España Mariano Rajoy y su ex ministro José Manuel Soria están en el ojo de la tormenta por los Panamá Papers.
El ex ministro José Manuel Soria se vio obligado a renunciar luego de la publicación de los Panamá Papers, al no poder explicar su relación y la de miembros de su familia con una red de sociedades ubicadas en paraísos fiscales.
Su situación es similar a la de Mauricio Macri, pero en España la presión del periodismo y la sociedad en general lo hicieron dimitir, mientras que acá el presidente goza de un notorio blindaje de los medios de comunicación.
Lo cierto es que el escándalo que salpicó a Soria no se agotó con su renuncia. Mariano Rajoy decidió protegerlo otorgándole, en las sombras, el puesto de director ejecutivo del Banco Mundial, con un salario anual de 252.000 euros.
Aunque cuando se desató la polémica internacional el Gobierno aseguró que el entonces funcionario iría a “una universidad americana”, el pasado viernes 2 de septiembre, tras la segunda investidura fallida de Rajoy y mientras las cámaras miraban para otro lado, Soria accedía al cargo.
Lo cierto es que el escándalo que salpicó a Soria no se agotó con su renuncia. Mariano Rajoy decidió protegerlo otorgándole, en las sombras, el puesto de director ejecutivo del Banco Mundial, con un salario anual de 252.000 euros.
Una investigación periodística expuso rápidamente las irregularidades de la designación, desmintiendo que el proceso haya sido abierto, publicitado y compitiendo con otros funcionarios.
Desde la UGT se recordó que el Banco Mundial no saca a concurso el puesto y que éste apenas se mueve entre ciertas esferas del funcionariado. Si se hubieran cumplido los criterios de publicidad, mérito y capacidad presentados ante un tribunal imparcial, “miles de funcionarios habrían concurrido al puesto y estarían, además, sobradamente preparados”.
El caso es tan grave que puede afectar gravemente la figura de Rajoy y del Partido Popular de cara a las elecciones. Las críticas han llegado incluso desde el propio partido azul.
La primera prueba de fuego serán las elecciones vascas y gallegas del próximo 25 de septiembre, donde hablaran las urnas.
¿Se haran eco los medios argentinos de este escándalo que recorre el mundo y que salpica directamente al máximo mandatario de nuestro país?
